
¿Qué nos hizo diferentes como especie?
El investigador que se interesa por los albores de la humanidad tiene que tener una especial predisposición a la frustración pues el objeto principal de su estudio es como el espejismo del agua en una autopista en medio del desierto: se puede ver, a veces incluso con claridad meridiana, pero es imposible delimitarlo en un marco concreto de espacio y tiempo. Así, la frase “Desde el principio de los tiempos de la especie humana” se convierte en un comienzo harto inespecífico: N